¡Descubre cómo solucionar el problema de tu caldera sin presión con estos consejos expertos!

¿Tu caldera no tiene presión? Descubre todo lo que necesitas saber para solucionarlo

No hay nada peor que llegar a casa después de un largo día de trabajo y darte cuenta de que no hay agua caliente en casa. Si esto te ha pasado y has revisado tu caldera para descubrir que no tiene presión, no te preocupes, aquí te explicaremos todo lo que necesitas saber para solucionarlo en poco tiempo.

Primer paso: verificar la presión de la caldera

Lo primero que tienes que hacer es verificar la presión de la caldera. Para ello, asegúrate de que la caldera esté encendida y espera a que se caliente. Luego, busca el manómetro de la caldera, que es el instrumento que mide la presión del agua en el sistema. Si la presión está por debajo de 1 bar, es posible que esa sea la razón por la que no hay agua caliente en casa.

Segundo paso: cómo aumentar la presión de la caldera

Para aumentar la presión de la caldera, necesitas abrir la válvula de llenado de la caldera. Esta válvula suele estar cerca de la propia caldera. Antes de abrir la válvula, asegúrate de que la caldera esté apagada y fría. Una vez que hayas abierto la válvula, es posible que tengas que esperar unos minutos hasta que la presión suba a 1 bar. Verifica la presión regularmente mientras estás llenando la caldera para asegurarte de que no suba demasiado.

Tercer paso: comprobar si hay alguna fuga

Si has comprobado que la presión de la caldera está bien y todavía no hay agua caliente en casa, es posible que haya una fuga en el sistema. Comprueba los radiadores y las tuberías de la caldera en busca de posibles fugas. Si encuentras alguna, deberás llamar a un fontanero para que repare la fuga.

Cuarto paso: purgar los radiadores

Si has comprobado que no hay fugas en el sistema, pero los radiadores no calientan adecuadamente y la presión de la caldera sigue siendo baja, es posible que necesites purgar los radiadores. Este es un proceso sencillo que puedes hacer tú mismo. Solo necesitas un llave de radiador, que puedes encontrar en cualquier ferretería, y un cubo para recoger el agua sucia. Una vez que tengas todo lo necesario, sigue estos pasos:

1. Enciende la calefacción y espera a que los radiadores se calienten.
2. Apaga la caldera para evitar quemaduras.
3. Usa la llave de radiador para abrir la válvula de purga del radiador. La válvula suele estar en la parte superior del radiador.
4. Recoge el agua sucia en el cubo hasta que salga agua limpia.
5. Cierra la válvula de purga y repite el proceso con los demás radiadores de la casa.

Conclusión

En resumen, si tu caldera no tiene presión, es posible que necesites llenarla a través de la válvula de llenado. Si después de llenar la caldera todavía no hay agua caliente en casa, comprueba si hay alguna fuga y llama a un fontanero si es necesario. Si no hay fugas, es posible que necesites purgar los radiadores para mejorar el flujo de agua caliente en tu hogar. Recuerda hacer esto regularmente para prevenir problemas con tus radiadores y tu caldera en el futuro.